Así que, hace aproximadamente 8 meses aparece el que escribe en escena, que al igual que los anteriores no tenía apenas más que unos leves conocimientos de mecánica gracias a la obsesión de aprender y que llevé a cabo tras apuntarme a un ciclo de mecánica simplemente por hobby.
Cogimos uno de los bocanegras de Anxo y siguiendo sus indicaciones de "peor no puede quedar " empezamos a arreglarle todas aquellas cosas que impedían su correcto funcionamiento. Es ahí donde se nos une otro de los compañeros que formarán el equipo final, nuestro colega Toño.
Para nuestra sorpresa, el resultado fue tan bueno que como diría el célebre actor de 8 apellidos vascos, "estábamos muy arriba ". No obstante para llegar al éxito acumulamos algún fracasillo que afortunadamente ocurría tras tomarnos unos pinchos cada vez que había que probar el coche y nos dejaba tirados.
A partir de aquí es cuando comienza la aventura que tiene lugar en la Concentración Nacional del Club en Madrid.
En la comida de confraternización coinciden mi gran amigo Anxo con esa gran persona que seguramente todo el mundo conoce que es Antonio de Mallorca.
Antonio hacía tiempo que tenía un Bocanegra que había comprado, en Zaragoza, pero por circunstancias y por tener un parque móvil extenso le comenta a Anxo que estaba pensando en desguazar la unidad que poseía. Mi amigo Anxo en su obsesión por los bocanegras le dice que no lo haga y Antonio le comenta que si quiere el coche, que se lo regala. Un sueño hecho realidad para cualquiera.
Empieza aquí el punto de no retorno hacia lo que muchos calificaron de "vosotros estáis zumbaos ".
Irrumpe en la escena esa gran persona que es vuestro excelentísimo presidente, el Sr. Luís de Jaen, el cual le dice a Anxo, que si quiere queda con él y le lleva el Bocanegra a Galicia.
Después de esta declaración de intenciones Anxo reserva dos billetes de avión a Madrid para un servidor y él mismo y nos vamos un Viernes para la capital.
Sábado por la mañana, nervios a flor de piel y en la rotonda de la estación de Príncipe Pío en Madrid aparece a primera hora de la mañana el "Excelentísimo " Sr. Presidente con su plataforma y su Cherokee y allá nos fuimos a tierras mañas en un viaje muy agradable lleno de risas, discusiones de Seat y política actual como conversaciones. Tres horas después nos esperaría el maño de los Bocanegras, el Sr. Malopi, que fue un anfitrión excepcional y se encargó de mostrarnos "sus garajes " que escondían tesorillos muy interesantes.
Después de haber visto por fotos la unidad de Antonio, por fin llegábamos y lo veíamos en directo, y en contra de lo que suele ocurrir, tenía mejor pinta en vivo que en fotos. Lo primero que vi tras abrir el capó fue un ratón que había decidido que el Bocanegra era un buen sitio para vivir.
El coche llevaba 7 años parado y a la intemperie y estaba inmaculado. Un empujoncito y para la plataforma yâ?¦., rumbo a Galicia. Nos quedaban 800 km para el destino definitivo y allá nos fuimos los tres. Recuerdo que fueron muchas horas porque el tiempo no permitía ir más rápido y el amigo Luís luchaba por no desfallecer al volante ayudado por Anxo que trataba de amenizar, porque un servidor se apalancó en el asiento trasero del amplio Cherokee a modo de descanso del guerrero.
Cuatro de la mañana y llegamos a La Coruña muertos pero con el objetivo cumplido, ¡Grande Luís de Jaén!
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Poco a poco iré ilustrando la historia con fotos de lo que estamos haciendo.
